Devocional 48
“Abraham… consideró fiel al que le había hecho la promesa”. Heb. 11:11
Cuando seguimos a Jesucristo se trata de una Fe difícil porque Dios muchas veces nos sacude, nos moviliza, hay que partir y no conocemos el camino. Es una Fe difícil porque Dios nos pone a prueba [34]. No se trata de una Fe fácil. La Fe barata o fácil es cuando nos quedamos con una teología que no incomoda, que esta domesticada y es complaciente.
Una teología que apela a nuestro egoísmo y vanidad no conduce al seguimiento de Jesús. La Fe cara y difícil se coloca en una posición de riesgo. El final del camino para el Señor fue la Cruz. El nuestro podría ser algo parecido porque somos llamados a ser testigos hasta lo último de la tierra.
En este viaje la seguridad no cuenta. Es habitar en carpas de campaña y no podemos conciliar la Fe con el confort del viaje y la organización previa. Hay que ponerse a caminar, mover la carpa y estar en contacto con otras personas. Implica que no hemos llegado a nuestro destino final y que no somos propietarios de algún lugar en especial. Estamos en progreso y hay que avanzar. Es buscar un nuevo horizonte y llevar el mensaje del evangelio que transforma toda la existencia humana.
Pregunta para la reflexión:
¿Nuestra fe es riesgo o tiene la marca de la seguridad?
Pastor Carlos Scott
Misión Glocal