Devocional 15
“Tus siervos harán lo que el Señor ha mandado” Números 32:31
El proyecto del Reino de Dios requiere estar abiertos cuando somos desafiados, ser valientes y cooperar cuando se nos llama a la acción. La tendencia natural es ocuparnos de lo conocido, lo que solemos hacer, controlar y mirar por lo nuestro.
Este capítulo nos desafía a ser diferentes y encarnar los valores del Reino de Dios. Vivir con solidaridad, integridad y verdad. Las tribus de Rubén y Gad contestaron “No volveremos a nuestras casas hasta que cada uno de los israelitas haya recibido su heredad.” (v18)
Fueron humildes, aceptaron la exhortación de Moisés, estimaron a los demás y no miraron por lo suyo propio. Se transformaron en siervos. Cerraron filas sirviendo a Dios y unos a otros. Cuando esto sucede Dios es glorificado y la tarea es cumplida. La cooperación implica un compromiso a la unidad en Cristo y al amor unos con otros.
Cada iglesia local es “comunidad del reino de Dios” en unidad, cooperación, comunión y solidaridad con toda la iglesia global.
Que “toda la iglesia” en cooperación y comunión lleve todo el evangelio a todo el mundo hasta que el Señor vuelva.
Pregunta para la reflexión
¿Qué es lo que podemos dar, contribuir y colaborar con otros?
Por Carlos Scott
Misión Glocal